Erección del Ego

Elegir los libros por la portada es como elegir a las personas por la portada. Todos sabemos que el contenido es realmente lo bueno, e incluso que el tamaño no importa, aunque en ocasiones nos enamoremos ciegamente de una portada. Un buen contenido, con el tamaño adecuado y una hermosa portada podría dar lugar a una obra maestra. Con estos ingredientes, ¿podría resultar también una persona maestra? De momento El Rincón del Neologismo continúa trabajando firmemente en sus contenidos, en sus tamaños y se maquilla y peina todos los días para seguir estando tan guapo, por si acaso...



Erección del Ego: esta expresión sirve para referirnos al estado mental en el que entramos cuando somos conscientes de que alguien está diciendo algo positivo o elogioso sobre nosotros, ya sea referido a nuestro cuerpo, personalidad, nuestro trabajo, etcétera.

La psique es un concepto abstracto, cosa que nos hace pensar que no puede haber una erección ya que no hay nada que erguir; pero vamos a ver que sí. Cuando alguien te dice que eres una gran persona, que tienes unos ojos preciosos..., o tienes más de treinta comentarios cada vez que publicas en las redes sociales, y más de cien "me gusta" en tu última foto de perfil..., o eres una persona tan bonita que no sabes ligar porque siempre te han ligado entre piropos y algodones..., o haces tantas buenas acciones que consigues con ello palabras de gratitud y exaltación hacia tu maravilloso ser..., es imposible no tener una ligera sensación de elevación, de crecimiento en tu interior, síntoma de que el ego está erectando, e incluso si los elogios continúan puedes llegar a notar como tu pecho se pone duro y el corazón se acelera debido a la excitación de confirmar tus sospechas de que en realidad molas un huevo, y si todo esto continúa podrías incluso llegar al egoléxtasis y terminarías eyaculando unas blanquecinas lágrimas de emoción que correrían por tus mejillas y mejillón.

Todo esto es muy agradable, pero debemos tomar precauciones. La mente sólo es una parte de las que forman nuestro complejo ser y está custodiada por el peligroso y maquiavélico ego, pues cuando dejamos de ser niños y el ego erecta por primera vez quiere volver a erectar más veces, ya que este se siente bien y descubre su gran poder sobre nosotros, manipulando a la mente y al cuerpo para que continuemos haciendo cosas en nuestra vida que le proporcionen más erecciones, pudiendo convertirnos en unos déspotas al amparo del terrible error del egoísmo, el egocentrismo, el narcisismo y si eres famoso u político en la peor de las megalomanías.

Por otro lado, el ego está conectado mediante un cable micro USB a la autoestima, y claro, si este perdiera su fuerza tendríamos un problema que, de no ser debidamente tratado, podría derivar en baja autoestigma y al final en autoestigmatismo, de los cuales ya se habló en este blog. Entonces, no nos queda otra que buscar el equilibrio para que el ego le dé calorcito a la autoestima, sin que este crezca demasiado, más que nada para no terminar siendo un capullo integral, y si no hay manera de que puedas controlar tus erecciones porque estas en plena pubertad egolatril, lo mejor será que le hagas un buen pajón a tu ego mirando fotos tuyas en bolas, pero eso sí, cuando estés solo para no salpicar con tus gotitas de vanidad en la cara de nadie.

Un ego que erecta mucho es síntoma de que nos queremos poco y estamos buscando constantemente la aprobación en los demás, quizá porque no la encontramos en nosotros mismos. En El Rincón del Neologismo reconocemos que nos encanta cuando le dais al me gusta, compartís y comentáis las entradas, y os aseguramos no es una cuestión de ego, tan solo es una ayudita reafirmante para nuestra autoestima que todavía se hace preguntas sobre esta extraña e inevitable costumbre eréctil de seguir escribiendo.