Social Icons

miércoles, 24 de julio de 2013

¡Pobrertad divino tesoro!


Julian Assange (WikiLeaks), Edward Snowden (CIA, NSA), Bradley Manning (Inteligencia del ejército de EEUU)..., todos ellos están en contacto con el poder y dos de ellos trabajaron para el sistema. El precio de su silencio les puede solucionar su vida y la de sus hijos y sin embargo deciden poner en peligro su pellejo para que esta sociedad tenga una oportunidad de cambio. A varios millones de años luz de la labor de estos grandes hombres, EL RINCÓN DEL NEOLOGISMO aporta otra semana más su pequeño grano de polvo estelar con humor neolingüístico y reflexiones intergalácticas mientras brindamos porque la semilla que han plantado estos nuevos héroes comience a florecer en las altas esferas de poder...



Esta semana volvemos a estar de celebración en EL RINCÓN, el motivo esta vez es la entrada número 100 de nuestro Blog. Aclaremos que 100 entradas con apenas un mes de existencia, se debe a que hemos recopilado todas las entradas que hicimos antaño desde Facebook. Echando la mirada atrás nos damos cuenta de los graves problemas de INCONTINENCIA VERBAL que sufre nuestro redactor jefe, una enfermedad que aparte de incomodar a muchos de los que le rodean también le sirve de motor para llevar adelante su vida diaria y nuestro querido RINCÓN.

La palabra que hoy proponemos para que vayáis incluyendo en vuestras futuras conversaciones es:

POBRERTAD, sirve para referirnos a esa etapa de nuestra vida que comienza a partir de los treinta y tantos, cuando ya llevas bastantes cosa vividas, has trabajado varios años, deberías de estar más o menos establecido y con cierta tranquilidad, tener la mitad de la casa pagada y un coche de gama media a tu nombre, pero resulta que tienes el mismo poder adquisitivo de un pubertista de quince años.

Y es que la situación actual ha conseguido que una gran mayoría de gente desde los veintipocos hasta los treinta y muchos no tengan nada a su nombre y cuenten solo con 30€ en el bolsillo y 200€ en el banco, ya tengan trabajo estable, o estén trabajando en cuatro cosas a la vez para poder hacer un sueldo con el cual harían reír a un mileurista.

Lamentablemente, esta es la primera generación en décadas que va a vivir por debajo de las posibilidades de sus progenitores, con la gran suerte de que aún pueden contar con ellos para ser ayudados. Pero si la situación no mejora querrá decir que las generaciones siguientes ya no van a poder ser ayudadas por sus padres.

Está claro que de alguna manera nos la colaron y no nos dimos ni cuenta, porque nuestros padres con un solo sueldo pagaron su casa, un coche y un chalet antes de cumplir cincuenta años, ¿por qué nosotros nos somos capaces de hacer eso ni siquiera con dos sueldos?. Ahí parece ser que también nos la colaron, con el gran avance social que fue la incorporación de la mujer al mundo laboral, se suponía que las parejas tendrían el doble de poder adquisitivo y al final resultó que tienen menos de la mitad. ¿Tendrá esto algo que ver con que las rentas del capital y la especulación han superado a las rentas del trabajo humano?, no entraremos en análisis económicos porque nuestro hipotálamo no está para muchos trotes, así pues volvamos al lado humano de la cuestión.

La POBRERTAD es un mal de nuestros días que a muchos nos toca sufrir, pero también es una parte de esa inevitable vuelta a los orígenes del ser humano que ha comenzado hace unos años con esta crisis de valores y económica. La POBRERTAD ha llegado a nuestras vidas para decirnos que la mayor riqueza que tenemos es poder seguir siendo nosotros mismos independientemente de las condiciones materiales que nos rodeen, que seguimos siendo seres maravillosos y creativos, que podemos seguir disfrutando de la vida y de nuestra gente aunque ahora no tengamos nada para gastar, tal y como nos habían enseñado, que no pasa nada por en vez de salir a cenar a un restaurante hacer unos bocadillos e irte a ver como sale la luna sobre el mar con tu chica en la playa, que no pasa nada por en vez de salir de copas reunirte con tus amigos en la terraza de tu casa y compartir las birras que cada uno trae, que no pasa nada por en vez de ir al cine programar un ciclo de cine verano con el proyector de tu cuñado, al cual no soportas, en la pared del polideportivo de tu pueblo, ya que estas en el pueblo porque no puedes pagar por irte de vacaciones...

La POBRERTAD no es más que el efecto secundario de que algo hemos estado haciendo mal, pero solo es una etapa temporal en nuestras vidas, y cuando salgamos de ella y volvamos a tener dinero y comodidades, será el efecto secundario de que estamos haciendo lo correcto, que habremos encontrado quienes somos, que cada uno nos habremos acercado un poquito más a nuestra vocación laboral y habremos dejado de hacer lo que nos vaciaba y nos restaba energía y que el tiempo en que alguien decidía por nosotros, no sabíamos quienes eramos y estábamos perdidos ya pasó.

Y no queremos pecar de idealistas, pero el caso es que en EL RINCÓN DEL NEOLOGISMO opinamos como nuestro admirado Groucho Marx..., lo realmente bueno de la vida está en las pequeñas cosas..., los pequeños chalets en la playa, los pequeños yates, los pequeños Ferraris, las pequeñas vueltas al mundo, las pequeñas mujeres siliconadas u hombres hiper fibrados que solo nos quieren por nuestro dinero...

¡POBRERTAD divino tesoro!





2 comentarios:

  1. una de las formas de minimizar el efecto de pobrertad sobre la población seria reducir drásticamente el gasto en publicidad, pero...me hace tan feliz imaginar todo lo que podría tener...hum!!!...además seria mucho mas guap@!!!

    ResponderEliminar
  2. Yo creo que si el gasto de la publicidad se invirtiera en pubicidad estaríamos todos mucho más felices, jajajajajajaja..., y relajados...

    ResponderEliminar