Es imposible no desprender una lágrima de los ojos, ya bien sea por el humo, la ceniza, o por saber que cada vez que se quema un bosque, también se quema una parte de nosotros. La tecnología es capaz de enviar un robot a Marte en condiciones adversas, e incapaz de apagar un incendio en la Tierra en condiciones adversas. EL RINCÓN DEL NEOLOGISMO últimamente lanza pocas palabras nuevas a la inmensidad del espacio, pero de vez en cuando todavía sucede…
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Y la palabra que proponemos en esta absorta entrega del RINCÓN es:
INDECENDIO, como nuestros neologistas más avanzados ya se habrán dado cuenta se trata de la juntación de dos palabras, INDECENCIA e INCENDIO.
No caeremos en el tópico de culpar al gobierno de los INCENDIOS de la Comunidad Valenciana, pero claro está que cuando el fondo común de los españoles se gasta durante años en absurdos puestos directivos, en empresas y fundaciones ficticias, en una banca gestionada en contra del ciudadano, en corrupción…, luego realmente hace falta el dinero y resulta que no hay, entonces llegan los recortes.
Hemos sido conscientes de varios sectores que se han visto muy afectados y sus colectivos han salido a la calle a protestar. Pero sin nosotros saberlo también ha habido recortes en prevención de incendios y en medios para acabar con ellos, lo que ocurre esta vez es que quien tenía que salir a la calle a protestar es la última voz que nadie quiere escuchar; la voz de nuestra flora y fauna.
Esos son colectivos que tienen ciertas dificultades para unirse en una protesta por razones obvias.
La situación habría cambiado mucho en el caso de que los arboles hubiesen desenterrado sus raíces del suelo, y hubiesen andado y agitado sus ramas en una cacerolada masiva en la plaza del ayuntamiento. La famosa cabra calcinada de las fotos, que fue sorprendida por el fuego mientras preparaba pancartas con consignas del 15M, al arder el aerosol con el contacto de una piña incendiada que saltó de unos arbustos. Todos los pájaros y aves haciendo huelga de excreciones para tener sus municiones dispuestas el día de la protesta y poderlas lanzar con desprecio a las furgonetas de la policía antidisturbios que ante una amenaza vegetal de matorrales enfadados y cardos secos cargaron sin piedad a la orden de un jefe de policía que gritó “ellos son el enemigo”. Matas de romero, espinos, abetos y algún alcornoque despistado fueron arrestados y ahora tienen cargos judiciales…
No nos habíamos dado cuenta de estos recortes porque no tenían voz, pero, ¿de cuántas parcelas más sin voz de nuestro día a día no nos damos cuenta que se están quedando desatendidas?
¿Para cuándo recortes en soberbia, avaricia, corrupción, irresponsabilidad…?
INDECENDIO, como nuestros neologistas más avanzados ya se habrán dado cuenta se trata de la juntación de dos palabras, INDECENCIA e INCENDIO.
No caeremos en el tópico de culpar al gobierno de los INCENDIOS de la Comunidad Valenciana, pero claro está que cuando el fondo común de los españoles se gasta durante años en absurdos puestos directivos, en empresas y fundaciones ficticias, en una banca gestionada en contra del ciudadano, en corrupción…, luego realmente hace falta el dinero y resulta que no hay, entonces llegan los recortes.
Hemos sido conscientes de varios sectores que se han visto muy afectados y sus colectivos han salido a la calle a protestar. Pero sin nosotros saberlo también ha habido recortes en prevención de incendios y en medios para acabar con ellos, lo que ocurre esta vez es que quien tenía que salir a la calle a protestar es la última voz que nadie quiere escuchar; la voz de nuestra flora y fauna.
Esos son colectivos que tienen ciertas dificultades para unirse en una protesta por razones obvias.
La situación habría cambiado mucho en el caso de que los arboles hubiesen desenterrado sus raíces del suelo, y hubiesen andado y agitado sus ramas en una cacerolada masiva en la plaza del ayuntamiento. La famosa cabra calcinada de las fotos, que fue sorprendida por el fuego mientras preparaba pancartas con consignas del 15M, al arder el aerosol con el contacto de una piña incendiada que saltó de unos arbustos. Todos los pájaros y aves haciendo huelga de excreciones para tener sus municiones dispuestas el día de la protesta y poderlas lanzar con desprecio a las furgonetas de la policía antidisturbios que ante una amenaza vegetal de matorrales enfadados y cardos secos cargaron sin piedad a la orden de un jefe de policía que gritó “ellos son el enemigo”. Matas de romero, espinos, abetos y algún alcornoque despistado fueron arrestados y ahora tienen cargos judiciales…
No nos habíamos dado cuenta de estos recortes porque no tenían voz, pero, ¿de cuántas parcelas más sin voz de nuestro día a día no nos damos cuenta que se están quedando desatendidas?
¿Para cuándo recortes en soberbia, avaricia, corrupción, irresponsabilidad…?
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